¿Cuántas veces ha paseado por una planta de fabricación fijándose en la tecnología de automatización? A menudo nos centramos en cosas más asociadas a nuestra tarea central, ya sea fabricar coches u hornear galletas.
Pero ¿cuándo fue la última vez que pasó un día completo con alguien del personal de mantenimiento? Normalmente, las actividades propias del mantenimiento no se tienen en cuenta al buscar maneras de reducir el despilfarro.
¿qué pasaría si utilizando arrancadores suaves pudiéramos reducir la frecuencia de estas operaciones de mantenimiento preventivo o acabar con ellas por completo?